Resumen 2011

Un repaso por los post publicados en el año.

Con la cabeza en otra parte: la selección de handball de Túnez debuta en el Mundial de Suecia al mismo tiempo que renunciaba el presidente tunecino en medio de un clima social muy tenso.

Perdido en Egipto: el tenista Mlandeli Ndlela vivió una odisea cuando intentó jugar un torneo en Egipto al mismo tiempo que el país ingresaba en ebullición.

Haití bajo cero: Jean Pierre Roy se convirtió en el primer esquiador haitiano que participó en el Mundial de ski.

La leyenda olvidada: la trágica historia de Eduard Streltsov. Pasó de ser el máximo ídolo del fútbol soviético y potencial figura del Mundial Suecia 1958 a ser un detenido en Siberia acusado de un crimen cuya investigación aún deja demasiadas dudas.

El mito del Giants Stadium: uno de los estadios más famosos de Estados Unidos y la leyenda urbana del cadáver del gremialista Jimmy Hoffa.

–  Un pionero llamado Wally Yonamine: primer jugador de beisbol estadounidense que jugó en la liga japonesa tras la Segunda Guerra Mundial y que ayudó a recomponer las relaciones entre ambos países.

Showtime en la URSS: en 1988 Atlanta Hawks realizó una caótica gira por la Unión Soviética que significó la única visita de una franquicia de la NBA a suelo comunista.

Rebel Tour: jugar en el Apartheid: entre 1982 y 1990 se organizaron una serie de partidos de cricket con combinados de fantasía conformados a fuerza de dinero que burlaron la prohibición que pesaba sobre Sudáfrica a causa del Apartheid.

Revolución cultural: gracias a los buenos resultados la selección femenina de fútbol de Corea del Norte se ganó el cariño del recientemente fallecido líder Kim Jonh Il y produjo un cambio en el rol de la mujer en la sociedad norcoreana.

La Generación del 80: la selección argentina de básquet que en el Preolímpico de Puerto Rico 1980 logró una histórica clasificación a los Juegos Olímpicos de Moscú, a los cuales no pudo asistir por cuestiones políticas.

Maravillas del béisbol: en la temporada 1945 Peter Gray y Bert Shepard fueron los únicos jugadores amputados que participaron en la Major League Baseball (MLB) de Estados Unidos.

Rocky de carne y hueso: Chuck Wepner, oscuro boxeador que tiró a la lona a Mohamed Ali y que sirvió de inspiración para la creación de la saga de Rocky.

Campeón incómodo: en medio de tensiones políticas Sudáfrica se transformó en el único país que ganó la Copa Davis por no presentación del rival en la final.

Cricket social: en un barrio marginal de Los Angeles con problemas de violencia, Compton Cricket Club aparece como una peculiar alternativa y como herramienta de reinserción para exconvictos. Además, el caso argentino en una villa de Barracas.

Bonus track: algunos post de años anteriores.

Mo Johnston y la muerte del sectarismo: por cuestiones religiosas la trasferencia del jugador escoses de moda produjo un quiebre en la centenaria historia de Rangers FC.

Superando obstáculos: Dalma Malhas, la primera mujer que representará a Arabia Saudita en los Juegos Olímpicos.

Dick, Kerr’s Ladies FC: Un equipo pionero: durante la Primera Guerra Mundial este equipo femenino surgido de una fábrica produjo una revolución en Inglaterra.

La historia jamás contada de los Blackbirds: un equipo de básquet universitario desechó la posibilidad de ir a los Juegos Olímpicos de Berlín 1936 en oposición al régimen nazi.

Ese caos llamado ABA: desorganizada liga que en la década del 70 marcó una época y sirvió de influencia a la actual NBA.

Cricket social

Compton arrastra un historial de mala fama que la llevó a ser considerada por el FBI como una de las 15 ciudades más peligrosas de Estados Unidos. Lejos del glamur de Bevery Hills o Hollywood, a esta localidad del Sur de Los Angeles se la suele vincular con el crimen y la violencia. En medio de este contexto marginal el cricket aparece como una inusual vía para cambiar esa visión negativa.

La aventura del Compton Cricket Club (CCC) nació en el año 1996 de la mano de Katy Haber, productora de cine británico que participó en Blade Runner, entre otras tantas películas, y Ted Hayes, militante por los derechos de los sin techo. Según explica la página oficial del club, el objetivo es buscar “una alternativa a las actividades de las pandillas que dominan el vecindario. La misión es proveer una vía de escape lejos de la violencia y las cárceles y dar una visión positiva y productiva del futuro”.

Los primeros pasos no fueron sencillos para el proyecto que originalmente se denominó LA Krickets. “Comenzamos a entrenar  en el arte del cricket con homeless en callejones y con material muy precario”, recuerda Hayes, quien conoció al deporte nacional inglés cuando Haber lo invitó a jugar al Bevery Hills Cricket Club y quedó maravillado al instante.

Compton Cricket Club.

CCC, que juega en parques públicos porque no posee cancha, ganó fama internacional. Los apodados Homies and the the Popz viajaron a Gran Bretaña en 1997, experiencia que se repitió en 1999 y 2001, teniendo la posibilidad de jugar en estadios importantes y codearse con la realeza. De golpe ex pandilleros de los suburbios de Los Angeles se encontraron rapeando en el Castillo de Windsor.

En febrero de 2011 CCC se convirtió en el primer equipo estadounidense de cricket que realizó una gira por Australia, una de las potencias de este deporte. Dos jugadores no pudieron participar: uno porque estaba bajo libertad condicional; otro porque había recibido un balazo en una pierna.

Estás visitas al extranjero también sirven para promover distintas campañas solidarias y juntar fondos para entidades benéficas. La última vez que visitaron Inglaterra los jugadores dieron una charla en una cárcel para menores contando cuales habían sido sus experiencias y como lograron reinsertarse en la sociedad. En Australia, en tanto, colaboraron en la recolección de dinero para los evacuados por las inundaciones.

“El 80 por ciento de los jóvenes que pasan por el programa asistencial consiguen trabajo o estudian”, explica Paul Smith, embajador global del CCC. Agrega: “Nuestra meta primordial no es un encontrar a la próxima gran estrella. Eso sería maravilloso. El objetivo es que la conducta del cricket pueda estar presente en la vida de la gente en una comunidad dominada por las pandillas”.

En estos casi 15 años de vida CCC, que recibe apoyo del municipio y de la policía local, fue campeón 2 veces de la British Cup y en 1 ocasión del torneo que organiza Los Angeles Social Cricket Alliance, competencia en la que participan equipos conformados por inmigrantes británicos, pakistaníes, australianos, indios y sudafricanos.

La banda de sonido que domina la escena de Compton es el hip hop, por ello para difundir el mensaje Theo e Issac Hayes, jugadores e hijos de uno de los fundadores del club, escribieron y cantan Bullets, el primer rap con una letra plagada de referencias al cricket que da como resultado una extraña mezcla entre la extrema caballerosidad del cricket y las zonas marginales angelinas. Un resumen perfecto de la filosofía del CCC.

La utilización del cricket, que suele ser presentado como el segundo deporte más practicado del mundo detrás del fútbol, como medio de inclusión social se ha expandido. En Nueva York la policía organiza una liga con el fin de vincular a las comunidades provenientes de ex colonias británicas del Caribe, Pakistán o India, sitios en donde el este deporte es muy popular, en Barcelona se está realizando un trabajo de similares características y en Namibia existe el llamado Maasai Cricket Warriors, equipo formado por jugadores surgidos de diversas tribus y que, principalmente, se encarga de concientizar y educar sobre la prevención del Sida, enfermedad que es una epidemia en la región.

Argentina no es ajena a esta situación y pese a que el cricket es practicado por un puñado de clubes y colegios de raigambre inglesa, en la Villa 21-24 de Barracas funciona el Caacupé Cricket Club. “Nuestro proyecto va más allá de fomentar una actividad deportiva; tiene un alto componente preventivo, educativo y con objetivos claros de integración social con otros estratos socioeconómicos”, explicó al diario La Nación Daniel Juárez, líder del proyecto.

“En 2009 se me ocurrió plantearle al padre Pepe Di Paola la posibilidad de ofrecer a los chicos de la villa el cricket como uno de los servicios gratuitos de la parroquia y como una forma de integrarlos a la vida cultural y social, alejándolos de la posibilidad de la violencia o la droga”, manifestó Juárez, contador que lleva los números de la Parroquia Virgen de los Milagros de Caacupé y que además es jugador.

Caacupé Cricket Club (Diario Perfil)

Caacupé Cricket Club, que no cuenta con ningún respaldo estatal y se sostiene a base de donaciones, nació con 6 chicos y gracias al boca a boca hoy ya son más de 50 entre las que se incluyen un grupo de nenas por lo que se piensa armar un equipo femenino. Paralelamente, los chicos cuentan con asistencia psicológica y se les hace un seguimiento del progreso escolar y, en caso de necesitarlo, se les brinda clases particulares.

En lo deportivo el CCC argentino también da sus frutos. Varios de sus jugadores fueron convocados para la selección argentina sub 13 que disputó el sudamericano en Perú en el cual Argentina fue subcampeón en el torneo regular y campeón en la categoría cricket veloz (versión reducida del juego).

Ya sea en Compton, Nueva York, Barcelona, Namibia o Barracas, el deporte de base y a nivel social, en este caso el cricket, sigue siendo una herramienta de integración demasiado importante la cual no siempre se tiene en cuenta.

Cricket en la Villa 21-24

Fuentes/Links relacionados

Cricketers in the hood (The Guardian)

LA cricket: Club helps tame Compton’s mean streets (BBC)

Something Wicket This Way Comes (Los Angeles Times Magazine)

Sitio oficial del Compton Cricket Club

Sitio oficial de la gira de Compton Cricket Club por Australia

With Evert Whack of the Cricket Bat, a Bond (New York Times)

NYPD Cricket (CNN)

Cricket en la villa, una vía de integración (La Nación)

Aprendieron cricket en la villa y son campeones sudamericanos (Perfil)

Cricket and the Maasai Warriors (The Guardian)

Campeón incómodo

De los 13 países que conquistaron la Copa Davis desde que esta competencia se instauró en 1900 Sudáfrica aparece como el único que ganó la famosa Ensaladera de Plata sin la necesidad de tener que jugar la final. La definición de la edición 1974 fue la más controversial de la historia del torneo porque India, el otro finalista, se negó a jugar en el Ellis Park de Johannesburgo como protesta y forma de presión contra el Apartheid.

Por aquellos años las críticas y las demandas de boicot contra Sudáfrica en diversos ámbitos eran constantes. La primera medida fuerte desde el deporte se produjo en 1970 cuando el Comité Olímpico Internacional (COI) expulsó al Comité Olímpico Sudafricano. Varias federaciones internacionales siguieron el mismo camino; otras, en cambio, no lo hicieron bajo el pretexto de no mezclar deporte y política.

La Federación Internacional de Tenis (ITF), que no formaba parte del Movimiento Olímpico, había suspendido a la Asociación Sudafricana de Tenis (AST) en 1970. Al año siguiente levantó la sanción, pese a las quejas que tenían como vocero más importante a Arthur Ashe, y amenazó con penalizar a las asociaciones que boicotearan a Sudáfrica.

Mientras tanto los jugadores de aquel país en cada torneo en el que participaban por el circuito eran vistos como parias. Esto derivó en que Cliff Drysdale, el mejor jugador sudafricano, decidiera renunciar a la Copa Davis y a la ciudadanía. “Me siento como un invitado que no es bienvenido. Ya tuve suficiente de esto”, expresó Drysdale, cuyo logró más destacado fue el título de dobles en el US Open 1972.

Cliff Drysdale en Wimbledon 1974 (Getty Images)

El andar de Sudáfrica por la Copa Davis era cada vez más tumultuoso y 1974 se vivieron los momentos más álgidos y tensos. A raíz de la estructura del torneo los sudafricanos fueron ubicados en la Zona Sudamericana. El sorteo indicó que el rival del debut era Argentina, que por segunda y última vez en la historia perdió por no presentación.

En la siguiente instancia Sudáfrica tenía que visitar a Chile, que decidió ceder la localía y mudarse a Bogotá. “El presidente (Salvador) Allende me dijo que el tema era sensible. Pensé que el país podía tener un conflicto diplomático serio y, luego de hablarlo con los jugadores, resolvimos jugar afuera. Preferimos proteger los intereses del país por sobre los del tenis”, contó Hernán Basagotia, quien era el máximo mandatario de la Federación Chilena de Tenis.

Sudáfrica se impuso 3-2 en la capital colombiana en lo que fue la última presentación de Drysdale y accedió a la final regional, instancia en la que esperaba Colombia, a la que también venció 3-2. Ya por las semifinales del Interzonal los sudafricanos eliminaron con un 4-1 a Italia en Johannesburgo. De golpe el enemigo público número 1 quedó a un paso de alzar la Copa Davis.

Paralelamente India, con los hermanos Vijay y Anand Amritraj como únicos componentes del equipo, registró una actuación histórica. En la definición regional eliminó a Australia, campeón el año anterior, con un épico 3-2 y en las semifinales del Interzonal se impuso sobre la dura Unión Soviética por 3-1.

Que sudafricanos e indios llegaran a la final de la Copa Davis parecía ser una absurda y macabra burla del destino. Desde que el Apartheid se instaló en Sudáfrica en 1948, India fue uno de los países que más fuerte apoyó todo tipo movimiento contrario a esa política racista aludiendo que la minoría india que vivía allí estaba siendo segregada y duramente castigada. Por eso desde primer momento el gobierno de la Primer Ministro Indra Gandhi presionó para que el combinado de su país no se presente, ni siquiera en terreno neutral, tibia opción que también se barajó. No hubo solución y por única vez en la existencia de la Copa Davis un campeón se consagró por walkover (no presentación).

“Estábamos orgullos de ver nuestros nombres en la Copa Davis, pero teníamos un gusto amargo en la boca”, recordó Bob Hewitt, doblista del equipo que cortó el duopolio que mantenían Estados Unidos y Australia desde 1937 y que hace poco volvió a ser noticia por denuncias de abuso sexual.

Placa recordatoria en el trofeo de la Copa Davis de las temporadas 73 y 74. (Captura tomada del sitio oficial de la Copa Davis)

“Moralmente fue una decisión fácil de tomar, pero como deportista había dos pensamientos en mi cabeza: uno era que quizás nunca más iba a jugar otra final de Copa Davis; la segunda es que nunca íbamos a tener una chance tan buena de ganar la Copa Davis”, expresó Vijay Amritraj en un discurso que dio en 1988 ante el Comité Especial de las Naciones Unidas contra el Apartheid.

“El gobierno indio tenía razón. Si más países hubieran boicoteado a Sudáfrica quizás el Apartheid hubiera caído más pronto”, expresó Raymond Moore, otro miembro del combinado africano y que actualmente es el director del Masters 1000 de Indian Wells.

A Sudáfrica el andar por la Copa Davis se le volvió cada vez más tortuoso y a sus rivales tener que enfrentarla les generaba un problema extra que escapaba largamente a lo deportivo. Las deserciones y las protestas se habían vuelto moneda corriente y la situación llegó un punto límite en 1977 cuando 15 naciones renunciaron a seguir participando por la presencia sudafricana.

Para 1979 la ITF realizó una reestructuración en el formato del torneo y además decidió marginar a Sudáfrica, en lo que también se puede leer como gesto hacía el COI en busca de la reinserción del tenis a los Juegos Olímpicos, algo que ocurrió en Seúl 1988. La AST fue readmitida en 1992.

India, que retornó a una final en 1987, la cual perdió 5-0 con Suecia, y Sudáfrica volvieron a cruzar sus caminos en la Copa Davis en dos oportunidades: la primera fue en 1994 con los indios como locales; la segunda en 2009 en el Ellis Park de Johannesburgo.

A Sudáfrica haber ganado la única Copa Davis de esta manera no es algo que lo enorgullezca, de hecho en el sitio oficial de la AST no hay ninguna mención al respecto. Quedar como el único país que conquistó el tradicional torneo sin la necesidad de la disputa deportiva, sumado al contexto social y político, coloca a Sudáfrica en el rol de campeón incómodo.

Fuentes/Links relacionados

The Year the Davis Cup Felt Empty (New York Times)

United Nations, India and Boycott of Apartheid Sport (Congreso Nacional Africano)

Deep Tennis: Disrupting the Cup (Concrete Elbow)

Ban From Olympics Turns Into Net Loss: Tennis: South African players hadn’t been hurt by most world sanctions until IOC ruling (Los Angeles Times)

Un regreso con vida (El Gráfico)

Sitio oficial de la Copa Davis

Sitio oficial de la Federación Internacional de Tenis